jueves, 3 de noviembre de 2011

Astral Doors - Jerusalem (crítica)


Los suecos Astral Doors han vuelto por la puerta grande al panorama metálico internacional. Si bien nunca se fueron del todo, 13 discos les contemplan, este nuevo trabajo pensamos que es posiblemente el mejor disco que han editado nunca por varios motivos que os explicamos a continuación.



Como ya sabéis, nos gustan poco, por no decir nada, las fotocopias de grupos exitosos. Copiar es fácil pero no tanto seguir tu propio camino. Si bien Astral Doors se han caracterizado siempre, "por culpa" de la voz de Nils Patrik Johansson, de sonar demasiado a Dio y a todas las bandas por donde pasó el extinto cantante, en este disco se han dedicado, exclusivamente, a recoger lo mejor de grupos como Rainbow y Dio.

 ¿No decías que no te gustan las copias? Exacto, pero una cosa es "sonar como" y otras copiar. En este caso encontramos un trabajo bastante digno, un cantante a pleno rendimiento y enormes canciones que se te quedan a la primera escucha. "Child of rock and roll", ved el video al final del post, es un single brutal. 

"Pearl Harbour" es un tema de metal clásico como hacía años que no escuchaba en un disco nuevo, "Lost Crucifix" tiene todos los elementos necesarios para enamorarte, "Babylon Rise" tiene un riff brutal de los tiempos de Sabbath con Tony Martin pero modernizado al máximo. "Suicide Rime" tiene un riff muy progresivo y potente que demuestra el alto nivel musical del grupo. 

"Operation freedom" me recuerda un poco a los Accept de la primera época aunque siempre con el toque de los suecos. "The day before yesterday" es otro temazo y el mejor del disco "Jerusalem" se merece ser el que le da nombre al disco y mucho más. 

Los que no he citado son igual de buenos que los que aquí aparecen por lo que sólo te queda comprarte este disco para reconciliarte con un tipo de metal que se está perdiendo. Recomendable.

No hay comentarios:

Opeth - The last will and testament (crítica)

Resulta sorprendente que el gran Mikael Åkerfeldt haya decidido tirarse al monte y marcarse un disco conceptual de rock progresivo tal y com...